La desinfección de cámaras frigoríficas y un mantenimiento preventivo es esencial para garantizar no solo la higiene y seguridad alimentaria en el almacén, sino también el rendimiento de la instalación frigorífica. Veamos en profundidad cómo alargar la vida útil de la cámara frigorífica.
Mantenimiento periódico de las cámaras frigoríficas
El 80% de las averías son provocadas por falta de un mantenimiento eficaz y regular. Ello ocasiona un deterioro prematuro de la cámara, la pérdida de refrigeración y un consumo de energía excesivo, entre otros inconvenientes. Cabe señalar que realizar un mantenimiento periódico es obligatorio por parte del propietario. Si se produce un accidente y no se ha llevado a cabo un mantenimiento por parte de una empresa especializada, la responsabilidad recaerá en el propietario al estar obligado a contratar dicho servicio. En Kavidoors realizamos un mantenimiento periódico exhaustivo de las naves frigoríficas acorde a las características de cada instalación, revisando el estado del aislamiento y el correcto funcionamiento de las puertas. Pese a ello, hay dos puntos en los que el usuario juega un papel fundamental para el mantenimiento de las cámaras: la limpieza y la detección de posibles fallos de funcionamiento entre una revisión y otra.
Desinfección de cámaras frigoríficas en profundidad
La limpieza de la cámara frigorífica no solo se centra en la eliminación de suciedad de la cámara, sino que también se ha de evitar la formación de escarcha; desinfectar la cámara y realizar el mantenimiento de los equipos de refrigeración. Para asegurar una correcta higienización de las cámaras frigoríficas evitando que se rompa la cadena de frío, se han de utilizar productos compatibles con la alimentación como lo es el ozono. Se trata de un agente antimicrobiano y desinfectante capaz de eliminar las bacterias de la superficie sin dejar en los alimentos residuos nocivos para la salud.
El ozono permite una desinfección de cámaras frigoríficas completa sin sacar el género del interior de las mismas, lo que favorece a que no se rompa la cadena de frío de los productos. Por otro lado, ayuda a prolongar la vida útil de productos alimenticios al eliminar los microorganismos responsables de que el género se pudra y se descomponga. También evita la aparición de moho en fruta, verdura y bollería.
Pese a las grandes ventajas de desinfectar con ozono las cámaras frigoríficas, de nada sirve tener la sala perfectamente limpia si previamente no se limpian los productos nuevos que permanecerán en el interior de las mismas.
Limpieza habitual en almacenes frigoríficos
La limpieza del almacén ha de hacerse mínimo semanalmente. Se recomienda fijar un día concreto para realizar dichas labores, evitando que se dilaten en el tiempo sin darnos cuenta.
Se deberá hacer con agua, a una temperatura máxima de 30 °C, de arriba a abajo. Si fuese necesario se puede aplicar una solución jabonosa con Ph neutro a base de un 10% de detergente doméstico y agua. No se recomienda utilizar máquina a presión, pero de ser inevitable, deberá realizarse por debajo de los 5 bar.
Si en el momento de la instalación de los paneles de la cámara quedaron adheridos a la superficie sellantes y masillas, pueden eliminarse con un trapo húmedo empapado con una disolución de alcohol en agua al 15%. Nunca se ha de aplicar directamente sobre la superficie. Una vez limpio, lavar el panel con abundante agua.
Nunca ha de utilizarse agentes de limpieza alcalinos o ácidos, así como agentes decapantes, MEK, gasóleo, acetona, amoniaco, disolventes, compuestos clorados o detergentes que contengan partículas abrasivas.
Realizando estas tareas de mantenimiento y limpieza con la periodicidad adecuada, garantizamos un funcionamiento eficaz a medio y largo plazo de la cámara frigorífica; la conservación de los productos y la salud de los operarios. ¡Apúntate a nuestro boletín informativo gratuito si te ha parecido interesante el contenido de este artículo! 😉
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